Descender hasta las estrellas,
subir hasta las profundidades
esconderse al descubierto
asomarse a la fuente del deseo.
Dibujar sin lapiceros
estudiarse sin libros
cobijarse sin guarida,
plantar las huellas al aire.
Mirarse en el agua del despeje,
en las yemas de los pinos peinarse,
descubrirse en un sin fin de pasajes...
...entornados desde el descuido,
imaginarse en un sinsentido.
Que el frío me temple...
sin brío.
Que el calor me enfríe...
sin pudor.
Y qué más da
si un canto acelere
y la voz me alegre.
Si de tanta luz en la noche...
se cruzaron destinos
no en torbellinos
ni en laberintos...
Todo se ha de ver con ojos distintos
y con los de uno.
Que él que lee desempeñe
o él que escribe sugiere
y se desprende,
que si la prosa y no es broza
y la poesía es jardín de rosas...
qué más da
si recogida en la metáfora está.
Que no, o se entienda
a sabiendas, en su elocuencia
el-al autor no llega
si no por referencia de contextos,
en el mundano tumulto,
no arrima su fruto,
haciendo el verso indulto
y a veces hasta difunto.
30 / 08/ 2013
Mgig
↭
No hay comentarios:
Publicar un comentario